Historia de la Champions (II): España manda en el palmarés

En 1992, la antigua Copa de Europa adquirió el formato de Liga de Campeones, con una liguilla inicial para acompalar a las tradicionales eliminatorias.

 
Además, a partir de 1997 cambiaron las reglas para permitir la participación de más equipos de las ligas más importantes. De este modo, la representación española se ha ampliado con los torneos disputados por Deportivo, Villarreal (ambos equipos llegaron a semifinales), Mallorca, Celta, Betis y Málaga.
El primer año de Liga de Campeones o Champions League, el Olympique de Marsella daba a Francia su único título hasta la fecha venciendo en la final al Milan, que volvería a la senda del triunfo el año siguiente con una goleada en Atenas al Barcelona, ya con Fabio Capello en el banquillo, que significó el final del ‘Dream Team’.
Ahí comenzó la maldición del equipo campeón, incapaz de repetir título bajo el nuevo formato. El Ajax venció en 1995  al Milan, la Juventus lograría ganar al Ajax en 1996 y el Borussia Dortmund devolvió el torneo a Alemania ganando al equipo ‘bianconero’ en 1997. El siguiente año, el Real Madrid rompía una sequía de 32 años para vencer a la propia Juventus en la final de Amsterdam, con un gol de Mijatovic.

El Real Madrid de los galácticos

Con jugadores como Raúl, Roberto Carlos, Figo o Zidane, el germen del Real Madrid de los ‘galácticos’ alternó el título de 1998 con los de 2000 y 2002. El primero es recordado por ser la primera final entre dos equipos de un mismo país en la historia de la Champions. El Valencia se plantaba en la final ante el conjunto merengue con un ligero favoritismo debido a la trayectoria de ambos clubes durante la temporada, aunque el Real Madrid tiró de experiencia para golear por 3-0.
El título madridista de 2002 será recordado por uno de los mejores goles jamás vistos en una final. Después de un balón de Roberto Carlos desde la banda izquierda que bajaba del cielo, Zidane enganchó una volea imposible que sirvió a los de Del Bosque para vencer al Bayer Leverkusen y lograr la novena Liga de Campeones para el Real Madrid.

Entre medias de los títulos del equipo blanco, dos históricos del fútbol europeo volvieron a reverdecer laureles. El Manchester United ganó en una de las remontadas más imprevisibles del fútbol moderno la final del Camp Nou de 1999. El Bayern ganaba 1-0 al llegar al descuento de la segunda parte y los hombres de Ferguson consiguieron darle la vuelta al partido en unos históricos tres minutos. Los bávaros se vengarían dos años más tarde al vencer en la tanda de penaltis al Valencia. Era la segunda final consecutiva del equipo ‘che’ y de nuevo una dolorosa derrota.
Milan y Oporto ganaron las finales de 2003 y 2004, siendo esta última una de las ediciones con más equipos revelación. La final la disputaron Oporto y Mónaco y cayó del lado de los de Mourinho. El año siguiente fue el del ‘milagro de Estambul’. El Milan vencía al Liverpool 3-0 al descanso y se las prometía felices pero en menos de 10 minutos los ‘reds’ conseguirían empatar y la parada de Dudek a Shevchenko en la tanda de penas máximas le dio el título al equipo ‘red’, el primero desde los años 80.
Al año siguiente volvía el Barcelona a una final de Champions y los Ronaldinho, Eto’o y compañía consiguieron remontar el tanto inicial del Arsenal con la ayuda de tres suplentes clave que revolucionaron el partido: Iniesta, Larsson y el autor del gol decisivo, Belletti. Un Kaká imperial le daba al Milan su séptima Copa de Europa en 2007 apoyado en los goles de Inzaghi y el Manchester United de Cristiano Ronaldo conseguía en los penaltis su tercera en 2008 ganando al Chelsea al aprovechar el resbalón de Terry en los penaltis.

El Pep Team

Ese verano, el de 2008, llegaba Pep Guardiola al Barcelona y comenzaba la sinfonía de uno de los mejores equipos de la historia. Con Xavi e Iniesta organizando y Messi llamando a la puerta del ‘Olimpo’ del fútbol, los culés lograron los títulos en 2009 y 2011, ambos frente al Manchester United. Sólo impidió el triplete la victoria del Inter de Mourinho y Diego Milito en 2010 en una final con aliciente especial para el equipo culé, ya que se jugaba en el Santiago Bernabéu.

El último equipo en sumarse a la lista de campeones de Europa fue el Chelsea al lograr vencer al Bayern en su propia casa, en esa tanda de penaltis que ya les quitó una Champions cuatro años antes. Después de todo su desembolso económico, Abramovich ya tenía su título apoyado en la ‘vieja guardia’: Cech, Terry, Lampard y Drogba. Muchos acusaban a Robben de ser un gafe en las grandes finales como las de Champions en 2010 y 2012 o el Mundial de 2010 y el holandés finalizó la racha con su gol al Borussia en la final de Wembley en 2013 para que el Bayern conquistara un nuevo título.
Un año después repetían dos equipos de un mismo país. Para ser más exactos, de una misma ciudad, ya que Madrid vivía su día grande en Lisboa con Real Madrid y Atlético peleando por ser campeones. Muy cerca estuvieron los colchoneros de lograrlo. Concretamente a dos minutos, tiempo que restaba de partido cuando Sergio Ramos neutralizó el gol de Godín mandando el partido a una prórroga que ya no resistieron las cansadas piernas atléticas.
La pasada temporada, el Barcelona, ya sustentado en la delantera MSN (Messi, Suárez y Neymar), dejaba a España como el único país en repetir título dentro del nuevo formato al vencer a la Juventus en Berlín y dejar al equipo culé en el podio de campeones, empatando con Liverpool y Bayern a cinco títulos.
Sesenta años después de ese título, de nuevo dos equipos de Madrid, como en 2014, se verán las caras en la final. San Siro decidirá si asistiremos a la undécima Champions del Real Madrid o si el Atlético del 'Cholo' Simeone logra el primer título rojiblanco.