Bale no tiene fecha de vuelta y Zidane se impacienta

La participación de Gareth Bale con el Real Madrid en la ida de octavos de Champions ante la Roma está definitivamente descartada. Se trata de una información que no es nueva, pues su ausencia en tierras italianas ya se daba por perdida debido a la necesidad de mantener la cautela con el maltrecho sóleo derecho del galés.

Sin embargo, la noticia está en que la visita al Olímpico romano está lejos de ser el único partido que se perderá el ex del Tottenham. Ello se debe a la complicación surgida en la recuperación del británico debido a un fallo en el diagnóstico inicial. Mientras que los servicios médicos del club blanco descartaban en principio una rotura del múscuslo ahora no la niegan, si bien el daño ya estaría hecho.
De acuerdo a dicho primer diagnóstico Bale venía trabajando en su recuperación a un ritmo más alto de lo conveniente. Por ello, en este momento no sólo se ve obligado a aminorar su ritmo, sino que también debe cargarse de paciencia para esperar su regreso, que como mínimo se estima para el 8 de marzo en la vuelta de Champions ante la Roma.
Esta circunstancia implica la ausencia del galés hasta en tres compromisos ligueros más de los esperado. Concretamente, la visita del Atlético de Madrid el 27 de febrero, el viaje al estadio del Levante el 2 de marzo y un nuevo partido en casa ante el Celta, el 5 de marzo. Si todo sale según lo esperado, Bale estaría disponible el 8 de marzo ante la Roma para un Zidane que, a pesar de su actitud conciliadora, no está a gusto con la situación del galés en particular ni con las últimas acuaciones del cuerpo médico en general.