El Athletic llega al parón frenado por el Madrid pero con buenas vibraciones

El Athletic Club llega al último parón liguero de la temporada frenado por el Real Madrid en su espectacular racha de 19 partidos sin perder en casa, con 16 victorias, pero con buenas vibraciones de cara a las diez jornadas que quedan para el final del campeonato.Ramón Orosa
En ese último tramo, el decisivo de la temporada, el equipo de Ernesto Valverde, séptimo en la tabla, quiere asaltar unas posiciones que le quedan a cuatro puntos de distancia, los que le sacan tanto el quinto como el sexto clasificados, el Villarreal y la Real Sociedad.
Aunque la séptima plaza en la que se encuentra también podría otorgarle el regreso a Europa si el FC Barcelona hace valer su favoritismo ante el Deportivo Alavés en la final de la Copa del Rey.
En ese séptimo puesto, el Athletic cuenta con tres puntos de ventaja sobre el Eibar, con cuatro sobre el Espanyol y el Alavés, y con seis sobre un Celta al que le queda también por jugar el choque ante el Real Madrid en Balaídos aplazado en su día.
Esos cuatro equipos, por cierto, son cuatro de los rivales a los que aún tiene que enfrentarse el conjunto bilbaíno, que recibirá al Espanyol y visitará Ipurua, Mendizorroza y Balaídos.
Los otro seis partidos que les quedan a los 'leones' son las visitas a San Mamés de la UD Las Palmas, el Betis y el Leganés, y las salidas a El Sadar, el Estadio de la Cerámica y el Vicente Calderón.
Aunque, más que en el calendario que le queda, también relevante, en lo que más se fija a este sprint final liguero el Athletic es en el estado de forma en el que llega a él. Y en ese sentido le fortalece el ánimo las prestaciones mostradas en los últimos partidos en Anoeta y ante el Madrid en Bilbao.
Porque si el equipo blanco le cortó la excepcional racha que mantenía en casa, en un partido en el que la alegría blanca tras el triunfo refleja con claridad lo que le costó conseguirlo ante un rival que le asedió hasta el final, en San Sebastián el Athletic acabó -con una victoria incontestable y de sabor europeo- con toda una vuelta liguera sin ganar a domicilio.
Ante los dos reales, los rojiblancos recordaron lo mejor de lo mucho destacado en los cuatro años de la segunda época del Txingurri en el banquillo de La Catedral. Un equipo poderoso en la presión y siempre dispuesto a jugar en campo contrario y alcanzar continuamente el área rival.
Al respecto, ha sido especialmente reseñable la mejoría de Iñaki Williams, de los más destacados en ambos partidos, goleador en el primero, asistente en el segundo y un continuo dolor de cabeza para su par, Yuri Berchiche y Marcelo, en los dos.
La recuperación de Williams ha coincidido además con el regreso de varios jugadores clave que estaban lesionados y elevan el nivel del equipo. En especial el meta Kepa Arrizabalaga, con sendas paradas en los dos encuentros de lo mejor de la temporada, y Aritz Aduriz, goleador ante el Madrid y siempre la referencia ofensiva más importante.
Ante los de Zinedine Zidane solo fueron bajas en el Athletic el sancionado, y también tocado, Mikel San José y el tercer portero Alex Remiro. A ambos y a Sabin Merino, parece que recuperado pero sin entrar aún en la convocatoria, se les espera ya de regreso a vuelta del parón, el sábado 1 de abril en El Sadar.
Como también a un Oscar de Marcos cercano a su nivel habitual, el que ya recordó en el último tramo del choque del sábado, que a veces no ha dado por sus continuos problemas físicos. Algo que también le ha ocurrido a Beñat Etxebarria, de nuevo también cercano a su mejor versión.
También San José y el joven Iñigo Lekue, que ante el Madrid incluso dejó en el banquillo a Iker Muniain, están subiendo el nivel. Y Aymeric Laporte y el propio Muniain, aún con altos y bajos, empiezan a recordar sus momentos más destacados.
Todos ellos se han sumado al carro de tres compañeros casi irreprochables en lo que va de curso, el siempre ejemplar en el esfuerzo y la entrega Mikel Balenziaga, el competitivo, goleador y líder Raúl García y Yeray Álvarez quien, en el año de su ascenso y tras superar un cáncer en apenas unas semanas, es siempre de los destacados de su equipo.
Gorka Iraizoz, ya suplente en lo que parece su últimos servicio al club tras diez temporadas, Eneko Bóveda, eficaz relevo tanto en el lateral como en el centro de la defensa, Ander Iturraspe, en la búsqueda del rendimiento que le hizo internacional, y Markel Susaeta, últimamente mejorado en su versión de relevo a los delanteros titulares, son otras piezas en las que se apoya su técnico, Ernesto Valverde, para asaltar las posiciones europeas.
Precisamente en el técnico, en su futuro, se centran las preocupaciones bilbaínas. A Valverde no paran de salirle 'novias' -el Barcelona, ahora se habla también del Arsenal- en el momento de la temporada en el que tiene que trasladarle al presidente Josu Urrutia su disposición a encadenar un quinto año consecutivo o su intención de acabar un ciclo que en principio veía solo de dos años.
Esa decisión y la gestión de la despedida de un Iraizoz sin oferta para continuar, son a la espera del devenir de las prestaciones de un Aduriz todavía estelar pero ya con 36 años, los principales motivos de preocupación para un Athletic que, como ha venido haciendo en el último lustro, quiere aprovechar el último tramo de LaLiga Santander para sacar su billete a Europa.