El apellido Rosberg vuelve a reinar en Mónaco treinta años después

Nico logra una merecida victoria emulando la gesta de su padre Keke.

Como de costumbre, Mónaco vivió una carrera repleta de emoción, incidentes, coches de seguridad y decisiones polémicas de los comisarios, que en esta ocasión afectaron a Fernando Alonso, que terminó en la séptima posición.
La victoria fue para el piloto alemán Nico Rosberg, que hizo buena la pole lograda ayer para sumar su primer triunfo de la temporada, emulando a su padre, Keke Rosberg, que ganó este Gran Premio por primera y única vez hace treinta años. El piloto de Mercedes hizo una carrera perfecta, controlando el ritmo en todo momento para cuidar sus neumáticos, sin cometer un solo error. Tan solo la presencia de un coche de seguridad en la vuelta treinta a punto estuvo de echar por tierra todas sus opciones...
Pero vayamos por partes. La salida fue limpia, algo poco habitual en el trazado urbano del Principado. Todos los favoritos conservaron sus posiciones, pese a que Vettel apretó de lo lindo para intentar ganarle el sitio a Hamilton. El piloto británico se defendió bien y, siguiendo la estrategia planeada por su equipo, hizo de 'tapón' durante varias vueltas para que su compañero en Mercedes abriera hueco. Sin embargo, su trabajo no obtuvo la recompensa esperada por culpa del primer coche de seguridad... Webber, Kimi y Alonso hicieron su primera parada antes de llegar a la vuelta treinta, confirmando que su estrategia de carrera iba a dos paradas.
Fue entonces cuando se vivió el primer percance serio de la tarde. Felipe Massa, calcando el accidente que sufrió ayer en los terceros libres y que le impidió participar en la clasificación, se fue contra las protecciones en la primera curva, terminando empotrado junto a la escapatoria de Santa Devota. El brasileño salió del coche por su propio pie, pero tuvo que ser atendido por los médicos, que le pusieron un collarín y le trasladaron al hospital para practicarle una revisión.

Durante algunos segundos, la dirección de carrera dudó si sacar a la pista el coche de seguridad, justo cuando Sebastian Vettel decidió entrar a boxes a hacer su primera parada. Con el campeón del mundo en el pitlane, el coche de seguridad hizo acto de presencia, complicando la vida a los Mercedes, que a toda prisa entraron en sus garajes a cambiar neumáticos. El perjudicado fue Lewis Hamilton, segundo antes de que apareciera el coche de seguridad, y que se reintegró a la pista en cuarta posición, por detrás de los dos Red Bull.
Cuando los restos del Ferrari F138 de Massa fueron retirados por la grúa y el coche médico se llevó a Massa, se relanzó la carrera. Se mantuvo una relativa calma durante poco menos de diez vueltas, con un único 'incidente', provocado por el feroz ataque de Sergio Pérez a Fernando Alonso en la chicane a la salida del túnel. El español, viendo que si mantenía la trayectoria terminaría chocando con el McLaren del mexicano, prefirió saltarse la chicane y conservar la sexta posición en la que rodaba.
Pocos segundos después, en la recta previa a Tabac, Max Chilton se movió hacia la derecha, sin darse cuenta de que por ahí llegaba Pastor Maldonado a toda velocidad. El Williams del venezolano salió por los aires, estampándose contra las protecciones, y dejando no sólo cientos de pedazos de fibra de carbono en la pista, sino parte de las protecciones bloqueando el paso. La decisión estaba clara: bandera roja.
Era la vuelta 46, es decir, todavía faltaban 32 para que terminara la carrera. Todos los pilotos se dirigieron a la parrilla de salida, donde podrían cambiar neumáticos y saldrían de nuevo tras el coche de seguridad. Fue entonces cuando los comisarios comunicaron a Fernando Alonso que su acción con Pérez en la chicane había sido antirreglamentaria y que tendría que cederle la posición cuando se reanudara la carrera. Y así fue...
La carrera dio comienzo de nuevo, con Rosberg en cabeza, seguido por los Red Bull, y con Alonso en séptima posición, muy lejos de lo que esperaba. Una posición que, además, perdió poco después, cuando Adrian Sutil se 'tiró' al hueco en pleno Loews, la curva más lenta del circuito. Fue, probablemente, el único fallo de concentración del asturiano en toda la carrera, que el Force India aprovechó para colarse, y situarse a la estela de Pérez.
Los accidentes siguieron poco después. Primero, el de Jules Bianchi, que con un más que probable fallo en sus frenos, terminó contra las protecciones en la escapatoria de Sta. Devota, donde algunas vueltas antes había concluido la carrera para Massa. Y después, con un fortísimo accidente entre Daniel Ricciardo y Romain Grosjean. En la recta, a la salida del túnel, el francés de Lotus se llevó por delante el monoplaza del australiano, y los dos terminaron en la escapatoria situada detrás de la chicane (escapatoria ampliada tras un grave accidente sufrido por Sergio Pérez temporadas atrás). Y otro coche de seguridad en pista...

A menos de diez vueltas del final, Sergio Pérez volvió a hacer una de las suyas, pero esta vez no encontró el premio que buscaba. Intentó adelantar a Kimi Raikkonen en el mismo sitio en el que pasó a Button y Alonso, pero el finlandés no le dejó hueco y terminó chocando contra las protecciones. Ahí, justo antes de la chicane, empezó a terminarse su carrera... Kimi tuvo que pasar por boxes por un pinchazo provocado en el incidente, perdiendo todas sus opciones. Y Pérez, que logró mantenerse en pista un par de vueltas, terminó retirándose al ver que era prácticamente imposible mantener la trayectoria con su McLaren. El justo final para un excesivamente agresivo piloto mexicano.
Con Kimi y Pérez fuera, Alonso ganó dos posiciones y unos puntos que, visto lo visto, pueden resultar fundamentales en la lucha por el título. El asturiano no pudo cumplir su objetivo de terminar por delante de sus dos grandes rivales, Kimi y Vettel, ya que el alemán se hizo con la segunda posición. Pero, como mal menor, recortó puntos en la clasificación con respecto al finlandés de Lotus. Además, está pendiente la investigación de un posible adelantamiento con banderas amarillas realizado por Adrian Sutil durante el primer Safety Car de la carrera, que podría aupar al español de Ferrari hasta la sexta plaza.
La victoria, merecidísima, fue para Nico Rosberg, repitiendo lo que ya hiciera treinta años atrás su padre, Keke Rosberg. Keke, campeón del mundo en 1982 con Williams, logró un año después, en 1983, su primer y único triunfo en las calles de Mónaco, ciudad en la que reside junto a toda su familia. Hoy, su hijo ha escrito una página brillante en la historia de la carrera. Por primera vez padre e hijo logran el triunfo en las calles del Principado. ¡Enhorabuena Nico!
CLASIFICACIÓN DE LA CARRERA - GP DE MÓNACO
1.- Nico Rosberg (Mercedes) 
2.- Sebastian Vettel (Red Bull Racing-Renault) a 3.8 
3.- Mark Webber (Red Bull Racing-Renault) a 6.3 
4.- Lewis Hamilton (Mercedes) a 13.8 
5.- Adrian Sutil Force (India-Mercedes) a 21.4 
6.- Jenson Button (McLaren-Mercedes) a 23.1 
7.- Fernando Alonso (Ferrari) a 26.7 
8.- Jean-Eric Vergne (STR-Ferrari) a 27.2 
9.- Paul di Resta (Force India-Mercedes) a 27.6 
10.- Kimi Räikkönen (Lotus-Renault) a 36.5