España entre federaciones que llamarán a jugadores y piden cambio en Euroliga

Seis federaciones nacionales de baloncesto, la española entre ellas, han confirmado este viernes en un comunicado conjunto que van a convocar para los partidos de clasificación del Mundial 2019 a jugadores que disputan la Euroliga, por lo que instan a esta competición a "reprogramar" su calendario para evitar coincidencias.España, Alemania, Rusia, Grecia, Italia y Turquía son las primeras federaciones que expresan su intención de ignorar la última propuesta de la máxima competición europea de clubes, que pretende agrupar todos los partidos de selecciones en el mes de julio.
Estas seis federaciones, que representan a países con 13 de los 16 clubes que competirán en la Euroliga 2017-2018, emplearán "todas las medidas" a su disposición "para proteger a sus equipos nacionales de la intromisión de la Euroliga", señalan en su nota.
Los entes nacionales se declaran "decepcionados por la postura irresponsable" de la Euroliga, "que da prioridad a sus intereses comerciales, por encima del bien del baloncesto en su conjunto y de los intereses de clubes, ligas locales y jugadores", al incrementar las fechas de partidos "de 24 a 37".
El calendario propuesto por la Euroliga perjudica asimismo a las selecciones nacionales, dicen las federaciones, "porque intenta marginarlas al programar partidos en las mismas fechas que encuentros de clasificación para el Mundial anunciados hace dos años, o al sugerir que los torneos de clasificación y principales competiciones se compriman en cuatro semanas de julio".
Las federaciones recuerdan "la voluntad expresada por los jugadores de representar a sus países".
Este comunicado conjunto sigue al emitido horas antes por la Federación Internacional de Baloncesto (FIBA), que consideraba "inaceptable" la propuesta de calendario que le hizo llegar el jueves la Euroliga.
La FIBA define el planteamiento como "una torpe táctica de distracción", que "simplemente no es seria y por tanto es inaceptable".
El organismo mundial reprocha a la Euroliga su pretensión de "desplazar la competición bandera de la FIBA (el Mundial) de septiembre a julio de 2019, e incluso intentar cambiar las fechas de los Juegos Olímpicos".
A juicio de la FIBA, la Euroliga tiene en sus manos la solución a un problema que "ha creado ella misma". Para hacerlo le basta, concreta, con "reprogramar dos jornadas de la temporada regular".
"La realidad", añade el comunicado, "es que la Euroliga considera que las selecciones nacionales son un miembro innecesario y molesto de la familia del baloncesto" y por ello desea "reducir su presencia en el calendario y marginarlas en un rincón del verano".